La Hiperestanflación de Mis Pesadillas






Este es el primer artículo mas compacto y conciso que en tres tiempos (Problema, Impacto, Medidas) pretende llevar al lector a la acción. Esta información es necesaria de saber para los tiempos que corren.


PROBLEMA

El banco más importante del mundo, la Reserva Federal de los Estados Unidos (la "Fed") está en quiebra y nadie lo ha anunciado oficialmente aun. 

El emisor del dólar norteamericano debe cerca de 200.000 millones de dólares a sus acreedores desde septiembre de 2022.

El dólar estuvo respaldado por oro hasta 1971 y fue la exigencia comercial para la compra de petróleo saudí hasta mediados de 2024 cuando expiró el acuerdo del petrodólar. 

Hoy el dólar es una moneda fiduciaria (una promesa de pago) cuya única fuente de credibilidad es la reputación política y económica de los Estados Unidos y de sus instituciones, como la Fed.

La Reserva Federal de Estados Unidos ha estado luchando contra un potencial colapso financiero desde la crisis Subprime de 2007-2008. Trillones de dólares han sido impresos desde entonces por todos los bancos centrales del mundo para cubrir un agujero financiero que parece cada vez más incontrolable. 

Este nuevo evento de deuda, esta vez dentro en la misma Fed, es solo otro capítulo en la guerra económica secreta que libran los grandes bancos centrales del mundo para evitar otro momento Subprime 2.0.  

La siguiente gráfica producida por la Reserva Federal de Saint Louis indica los pasivos y pagos mensuales de la Fed a sus acreedores, mayormente grandes bancos, y muestra un declive marcado y constante por falta de pagos desde septiembre de 2022.



Fuente: https://fred.stlouisfed.org/series/RESPPLLOPNWW


IMPACTO

Estados Unidos es el emisor de la moneda de reserva del mundo y a la vez el país más endeudado del planeta y cualquier acción irresponsable de parte de la Fed llevaría a la generación de niveles de deuda a niveles aun mayores.

Si la situación en la Fed no se arregla interna y calladamente, la gran burbuja de deuda global puede reventar, lo que generaría una mayor inflación, pero no solo por la mayor emisión de dinero, sino también porque las personas e instituciones globales perderían la confianza en esos papeles pintados llamados billetes y cambiarían sus dólares apresuradamente por cualquier otra cosa que mantenga cierto valor.

Dadas las altas tasas de endeudamiento que enfrentan los Estados Unidos, las necesarias alzas de impuestos e inflación serían rápidas e impactantes, algo así como lo sucedido en la hiperinflación de Weimar en los años 1921-1923. ( https://es.wikipedia.org/wiki/Hiperinflaci%C3%B3n_en_la_Rep%C3%BAblica_de_Weimar

Esto produciría una caída marcada de las bolsas y un frenazo en la actividad económica mundial, ya que las personas y las empresas se verían empujadas a gastar menos en bienes suntuarios (todo lo que no es necesario para vivir o funcionar).

Fuera de Estados Unidos la inflación sería de la mayor preocupación, mayormente porque, tal como el dólar, todas las monedas del mundo son fiduciarias y se verían enfrentadas al mismo paradigma de imprimir más moneda al mismo tiempo que pierden su credibilidad aceleradamente.


MEDIDAS

Los siguientes puntos no constituyen consejo financiero sino más bien sugerencias que le hagan sopesar al menos brevemente sobre su situación personal.

  • Sería práctico para todo asalariado afianzar desde ya las acreditaciones o certificaciones requeridas para su labor, además de plantearse ofrecer trabajos freelance o establecer una pequeña empresa de servicios, en caso que las contrataciones se vuelvan más inestables.
  • Es importante la afiliación con personas que permitan generar referencias o presentaciones con potenciales clientes. Puede iniciar desde ya ofreciendo en su red algún servicio gratuito o de bajo costo que permita a los demás comprender sus capacidades para el trabajo. 
  • Sería prudente tener un plan de inversión del capital en bienes que pueden subir de precio, como los commodities (oro, plata, petróleo, trigo, arroz), dependiendo de la capacidad financiera. 
  • También sería prudente deshacerse de las cosas que pueden bajar de precio, como los bienes suntuarios (desde la bicicleta que ya no usa hasta el segundo automóvil de la familia o una propiedad que no genere renta).
  • La deuda personal puede tomar dos rumbos, dependiendo de si es en moneda a precio fijo, que con la inflación tenderían a aliviar su carga debido a la devaluación. 
  • Al contrario las deudas ajustables a la inflación (como el caso de la UF en Chile) pueden volverse insostenibles si la situación no se estabiliza en un plazo corto.
  • Mantener dinero en efectivo durante una inflación elevada puede convertirse en una herida sangrante, pues el dinero puede llegar a perder gran parte de su poder adquisitivo en un corto tiempo. Si no se toma acción rápida Usted puede quedar con un montón de papel (o dígitos en el banco) sin ningún valor.
  • Siempre será prudente disponer de una despensa de alimentos que sirva de colchón ante las eventuales subidas de precio y eventual escasez de bienes de primera necesidad, al menos durante un tiempo, hasta que la economía encuentre sus propios equilibrios.
  • Ante las noticias desalentadoras sería sano cultivar desde hoy su salud espiritual, pues es fácil lucir tranquilo y compuesto cuando los tiempos son buenos, pero cuando las cosas se ponen difíciles el verdadero ser de cada quien aflora y más vale tener la fibra moral suficiente para soportar lo que sea que afrontemos.


CONCLUSIÓN

No sabemos si la falla en el sistema financiero norteamericano se resuelva pronto y en silencio o si más temprano que tarde este estalle como una gran burbuja de deuda afectando a todo el mundo. 

Lo que podemos hacer es comprender estos temas y prepararnos dentro de las posibilidades de cada quien, al menos para dormir tranquilos si es que el escenario planteado aquí llega a desarrollarse.

Bendiciones,


Luis Leighton




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