Siervos, Señores y el Fin de una Era
Estamos viviendo tiempos de cambio acelerado en los más variados aspectos y hasta cierto grado nos hemos acostumbrado a ello. Hoy las personas esperan que los cambios tecnológicos les traigan nuevos juguetes con los cuales poder dar más valor a su tiempo en medio de sus agitadas vidas.
Hace un siglo muchos signos indicaban un cambio del ritmo vital de la civilización humana llenando de optimismo a una generación. 100 años atrás ya se percibían cambios, con la reciente invención del avión se cambiaría la visión de la tierra, con la luz eléctrica la noche se volvería día, con el tamaño de los transatlánticos cientos de miles de personas podrían viajar, con la creación de la Reserva Federal de EEUU se acabarían las crisis, con las comunicaciones inalámbricas la información sería ilimitada, con el Ford T, la clase media sería independiente, con el auge del petróleo nuevos materiales y motores impulsarían nuevas y florecientes industrias. La expectativa de vida comenzó así a crecer exponencialmente. En 1900 la población mundial era de 1.650 millones, 112 años después sobrepasamos los 7.000 millones.
Ese ritmo acelerado de cambio no se ha detenido desde entonces, sin embargo hoy no nos encontramos tan optimistas como ocurría al comienzo del ciclo, como si el cambio, en su naturaleza misma, nos indicase que nos acercamos al fin de este.
Algunos dirán que este sentimiento viciado es culpa de ruido que hacen los medios con la profecía maya del fin del quinto ciclo, calculado para este año 2012, sin embargo siento que el giro hacia el lado oscuro nos fue anunciado desde comienzos del siglo 20. No falta más que recapitular en los golpes que avisa la historia. Algunos eventos se mantienen en el tiempo y otros han dejado huella como un blip dentro del inconsciente colectivo.
En 1912 el buque Titanic fue uno de los primeros avisos de la historia de que la confianza excesiva en la tecnología podría traer nefastas consecuencias (más impactante si cien años después de los hechos un barco crucero zozobra en el Mediterráneo llevando a un descendiente de alguien que murió en el Titanic).
En 1913 fue instaurada la Reserva Federal de EEUU para terminar con los vaivenes del mercado y las crisis que habían plagado la economía mundial. Sin embargo en 1929 se inició la "Gran Depresión", causa indirecta del auge del fascismo en Europa y de la Segunda Guerra Mundial.
En 1914 detonó la "Gran Guerra" (Primera Guerra Mundial) impulsada a nuevos niveles de destrucción gracias a los nuevos inventos en tecnología bélica, medios móviles y comunicaciones.
Hoy, en 2012, el Informe de Riesgos Globales del Foro Económico Internacional señala algunos de los mayores riesgos que enfrentará la humanidad desde este año y hacia el futuro:
Estos indicadores corresponden a riegos económicos y sociales cuyos números son realmente abismantes. Ya vimos que la población mundial ha crecido más de 400% en poco más de 100 años. Pues la economía entrega cifras pasmosas desde la crisis subprime, ya que desde 2008 se han impreso más dólares, euros, yuanes y yenes que en los últimos 100 años de historia combinados, convirtiendo a los habitantes del pequeño planeta Tierra en los más endeudados de este lado de la galaxia.
Los números y las tendencias dicen mucho si se les sabe interpretar. Mi interpretación es que estamos al fin de una era que comenzó hace más o menos 100 años con las nuevas tecnologías, el auge del petróleo y la explosión demográfica. El fin de este mini ciclo podría traer graves consecuencia según el informe señalado. Si estos escenarios se vuelven realidad, algo que la tendencia indica, la clase media del mundo podría ser barrida, volviendo a una era anterior, a un estatus similar al de la Edad Media en que solo existían dos clases sociales, los siervos y los señores feudales, los primeros esclavos de los segundos, el 99% sirviendo los intereses del 1%, algo así como el eslogan del movimiento "Occupy Wall Street".
Tengo un sentimiento ambivalente respecto de este tiempo que vivimos. Por un lado soy pesimista ya que este fin de ciclo traería grandes convulsiones y sufrimientos como todo cambio trae. Al mismo tiempo entiendo que todo cambio trae oportunidades que pueden ser explotadas y convertirse en las semillas de una nueva estructura.
Hay que estar preparados pues pienso que si todo sigue su curso actual este fin de ciclo acelerado podría concretarse dentro de los próximos años, dentro de esta misma década. Si los mayas tuvieron algo que ver con este sentimiento desmejorado es solo una lamentable coincidencia.
Hace un siglo muchos signos indicaban un cambio del ritmo vital de la civilización humana llenando de optimismo a una generación. 100 años atrás ya se percibían cambios, con la reciente invención del avión se cambiaría la visión de la tierra, con la luz eléctrica la noche se volvería día, con el tamaño de los transatlánticos cientos de miles de personas podrían viajar, con la creación de la Reserva Federal de EEUU se acabarían las crisis, con las comunicaciones inalámbricas la información sería ilimitada, con el Ford T, la clase media sería independiente, con el auge del petróleo nuevos materiales y motores impulsarían nuevas y florecientes industrias. La expectativa de vida comenzó así a crecer exponencialmente. En 1900 la población mundial era de 1.650 millones, 112 años después sobrepasamos los 7.000 millones.
Ese ritmo acelerado de cambio no se ha detenido desde entonces, sin embargo hoy no nos encontramos tan optimistas como ocurría al comienzo del ciclo, como si el cambio, en su naturaleza misma, nos indicase que nos acercamos al fin de este.
Algunos dirán que este sentimiento viciado es culpa de ruido que hacen los medios con la profecía maya del fin del quinto ciclo, calculado para este año 2012, sin embargo siento que el giro hacia el lado oscuro nos fue anunciado desde comienzos del siglo 20. No falta más que recapitular en los golpes que avisa la historia. Algunos eventos se mantienen en el tiempo y otros han dejado huella como un blip dentro del inconsciente colectivo.
En 1912 el buque Titanic fue uno de los primeros avisos de la historia de que la confianza excesiva en la tecnología podría traer nefastas consecuencias (más impactante si cien años después de los hechos un barco crucero zozobra en el Mediterráneo llevando a un descendiente de alguien que murió en el Titanic).
En 1913 fue instaurada la Reserva Federal de EEUU para terminar con los vaivenes del mercado y las crisis que habían plagado la economía mundial. Sin embargo en 1929 se inició la "Gran Depresión", causa indirecta del auge del fascismo en Europa y de la Segunda Guerra Mundial.
En 1914 detonó la "Gran Guerra" (Primera Guerra Mundial) impulsada a nuevos niveles de destrucción gracias a los nuevos inventos en tecnología bélica, medios móviles y comunicaciones.
Hoy, en 2012, el Informe de Riesgos Globales del Foro Económico Internacional señala algunos de los mayores riesgos que enfrentará la humanidad desde este año y hacia el futuro:
- Escasez de Agua: Más de 1.000 millones de personas no tienen acceso a agua potable para su diario vivir y más de 2.500 millones no tienen acceso a servicios sanitarios.
- Escasez de Alimentos: El clima y los costos de transportes pueden transformar la producción y la logística de la comida en los próximos años, a medida que el cambio climático transforma área completas con sequías e inundaciones.
- Falla Financiera Sistémica: Desde finales de 2007 el mundo vive el fin de una burbuja financiera detonada por los créditos inmobiliarios "Subprime". Cuatro años más tarde los países desarrollados están bajo presión por exceso de deuda, especialmente en Europa y EEUU.
- Disparidad Severa del Ingreso: Protestas y más protestas en todo lugar fue lo que marcó el año 2011, mayormente por una mayoría que exige cambios a una minoría política y financiera.
- Fallas Fiscales Crónicas: Los países con grandes contratos sociales de seguridad social y salud tienen una carga pesada que deberán balacear para sobrevivir.
- Volatilidad en Precios de Alimentos y Energía: Todas las crisis anteriormente señaladas han impactado a los alimentos y la energía, presionando cada vez más al alza los precios. Quizás haya alimentos, pero ¿Podrá pagar por ellos?
Estos indicadores corresponden a riegos económicos y sociales cuyos números son realmente abismantes. Ya vimos que la población mundial ha crecido más de 400% en poco más de 100 años. Pues la economía entrega cifras pasmosas desde la crisis subprime, ya que desde 2008 se han impreso más dólares, euros, yuanes y yenes que en los últimos 100 años de historia combinados, convirtiendo a los habitantes del pequeño planeta Tierra en los más endeudados de este lado de la galaxia.
Los números y las tendencias dicen mucho si se les sabe interpretar. Mi interpretación es que estamos al fin de una era que comenzó hace más o menos 100 años con las nuevas tecnologías, el auge del petróleo y la explosión demográfica. El fin de este mini ciclo podría traer graves consecuencia según el informe señalado. Si estos escenarios se vuelven realidad, algo que la tendencia indica, la clase media del mundo podría ser barrida, volviendo a una era anterior, a un estatus similar al de la Edad Media en que solo existían dos clases sociales, los siervos y los señores feudales, los primeros esclavos de los segundos, el 99% sirviendo los intereses del 1%, algo así como el eslogan del movimiento "Occupy Wall Street".
Tengo un sentimiento ambivalente respecto de este tiempo que vivimos. Por un lado soy pesimista ya que este fin de ciclo traería grandes convulsiones y sufrimientos como todo cambio trae. Al mismo tiempo entiendo que todo cambio trae oportunidades que pueden ser explotadas y convertirse en las semillas de una nueva estructura.
Hay que estar preparados pues pienso que si todo sigue su curso actual este fin de ciclo acelerado podría concretarse dentro de los próximos años, dentro de esta misma década. Si los mayas tuvieron algo que ver con este sentimiento desmejorado es solo una lamentable coincidencia.
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