La Desigualdad como Componente del Colapso del Modelo

La desigualdad es un tema que está resonando notoriamente en Chile por estos días, se escuchan cada vez más fuerte voces que recuerdan los años sesenta sobre estatizar la educación, aumentar el sueldo mínimo y hasta nacionalizar el cobre.

Y es que una economía liberal puede producir anticuerpos en la población, especialmente si su estándar de vida se ve cada vez más disminuido frente al crecimiento relativo de un país, si existe una base de pobreza que no avanza y una clase media que pelea descontroladamente con las deudas.

Las críticas al modelo económicas son válidas, pues el modelo no debería limitar la capacidad de desarrollo humano, al menos ese es i pensamiento. Ni el Comunismo, ni el Fascismo han podido abogarse el honor de ser consagrados como sistemas político-económicos válidos. Pero ojo, que el Capitalismo desbocado puede ser tan limitante al desarrollo humano como aquellos dos sistemas fallidos. Si el capitalismo de "libre industria" carga a las clases más bajas con mayores impuestos, mayor costo de la vida, menor acceso a la educación de calidad, vía altos costos, si todo eso pasa (y en realidad pasa) el sistema capitalista puede verse enfrentado a un cisma entre una gran masa de población servil y desposeída y una pequeña elite todopoderosa sin control. En este esquema desaparece la clase media, escalón fundamental de una sociedad sana.

¿Nada como esto pudo ser previsto por los fundadores del capitalismo moderno, llámense Smith o Keynes?

¿Qué le espera en los próximos años a Estados Unidos, adalid económico del mundo y al resto de las economías que adoptaron el modelo? Sin respuestas sanas no queda más que la revuelta popular y ante estas la vuelta a un estado centralizado, llámese fascistoide o comunistoide.

Mis dudas se acrecientan con cada noticia:

Advierten que Alta Desigualdad en EE.UU. Podría Comprometer a la Economía
Autor: Estrategia
miércoles, 06 de julio de 2011 22:02


PORCENTAJE. Según los últimos datos disponibles, el 10% más rico del país tiene casi los mismos ingresos que el 90% restante de la población.

En medio de la actual propuesta de la Casa Blanca de subir los impuestos a los millonarios como parte de las negociaciones para reducir el déficit, cada vez parecen ser más las voces que alertan sobre las consecuencias de la creciente desigualdad que ha experimentado la sociedad estadounidense en las últimas décadas.

"Creo justo el pedir a las petroleras o a los ejecutivos que viajan en aviones privados, a quienes les ha ido tan bien, que renuncien a sus ventajas fiscales", dijo recientemente el Presidente Barack Obama.

Y es que, según datos publicados por el diario The Washington Post, el 10% más rico de la población tenía en 2008, el último año para el que hay datos disponibles, casi los mismos ingresos que todo el resto del país junto.

Sarah Bloom Raskin, de la junta de gobernadores de la Reserva Federal, sostuvo que "esa desigualdad es desestabilizadora y mina la capacidad de la economía para crecer de forma sostenible y eficaz".

En tanto, el ex ministro de Economía turco, Kemal Dervis, ahora vicepresidente del centro de estudios Brookings Institution con sede en Washington, recordó que cuando un pequeño grupo concentra una gran parte de los ingresos hay que estimular la demanda o bien mediante tipos de interés muy bajos, o con prácticas hipotecarias irresponsables y un gran endeudamiento en las tarjetas de crédito, como fue el caso durante la mayor parte de la última década en EE.UU.

Comparaciones

Las estadísticas muestran que los ingresos del 0,1% más rico de la población, unos 152.000 estadounidenses, aumentaron un 385% entre 1970 y el 2008, hasta los US$5,6 millones promedio anuales.

En paralelo, el 90% cuenta con un ingreso medio anual de US$31.244.

La desigualdad ha aumentado también en países como China, India o Reino Unido, pero la tendencia ha sido más acusada en EE.UU.

Eso hace que la primera economía mundial aparezca ahora junto a países como Camerún y Costa de Marfil cuando se usa el denominado "coeficiente Gini", que mide el nivel de desigualdad.